El Movimiento Verde Cordobés, al igual que numerosas organizaciones ambientalistas y de la sociedad civil, hace un llamado enérgico al Congreso para que rechace rotundamente estas propuestas que atentan contra principios jurídicos y compromisos ambientales. Es fundamental proteger nuestro ambiente y nuestros recursos naturales, siendo conscientes de su importancia para las generaciones presentes y futuras.
El espacio político liderado por Pablo Riveros emitió un comunicado en el cual expresa su profunda preocupación ante el reciente mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y el proyecto de ley ómnibus presentado ante el Congreso Nacional por el Gobierno. Estas iniciativas representan un serio retroceso en la legislación ambiental, la cual ha sido obtenida a través de arduos esfuerzos y consensos.
En primer lugar, se destaca la modificación propuesta a la Ley de Bosques, la cual permitiría la realización de desmontes en las zonas rojo y amarillo, poniendo en peligro más del 70% de los territorios protegidos. Además, se observa una preocupante disminución en el financiamiento asignado a dicha ley, lo cual afectaría su efectiva implementación.
En relación a las medidas referentes a las quemas, se plantea la definición de «aprovechamiento productivo», lo cual facilitaría la realización de quemas sin un control previo riguroso. Además, se establece un plazo de 30 días hábiles para recibir una respuesta, considerando el silencio como una autorización tácita, lo cual genera inquietudes sobre la falta de supervisión y regulación adecuada.
Otra modificación preocupante es la propuesta de enmienda a la Ley de Glaciares, la cual busca permitir la actividad económica en zonas periglaciares, dando prioridad a los intereses mineros en detrimento de la protección socioambiental.
En cuanto a los cambios en la Ley de Pesca, se plantea una flexibilización en el otorgamiento de permisos y la liberación de aguas reservadas a los pesqueros de bandera argentina, lo cual podría tener un impacto negativo tanto en el empleo como en la biodiversidad marina.
Por último, se menciona la preocupante visión mercantilista en relación a los mercados de carbono, sin abordar de manera efectiva la urgencia de reducir las emisiones y cumplir con los compromisos internacionales en materia ambiental.
